¿PARTIDOS POLITICOS PRESCINDIBLES POR EL PUEBLO? Crisis
II
Nelson Valentín S 12/10/12
Los principios y
elementos básicos de representación, legitimidad, legalidad y reglas de juego
democráticas vienen cumpliéndose, sin embargo, el actor principal; los partidos
políticos no están cumpliendo su rol
como tal y son considerados prescindibles
por el pueblo.
Los partidos se han ganado la fama de ser instituciones políticas débiles, des institucionalizados,
frágiles en representación, aumento de
brechas con la ciudadanía y desconfianza generalizada.
Gran parte de la sociedad
da señales de anti-partido, además los
considera prescindibles, y que éstas no deben existir.
Algunos elementos que podemos recoger respecto a esta lectura:
1. Crisis de los partidos tradicionales: Debilidad programática, inorgánicos, excluyentes, mercenarios
, no conectivos y carentes de democracia interna,
a).- Porque la
sociedad y sus militantes les exigen democracia interna y no la practican menos
la poseen.
b).- Porque
sus dirigentes, cuadros fundadores o de mayor edad, los consideran sus patrimonios.
c).- Porque sus programas, estatutos y principios
no tienen congruencia con su práctica diaria, prima el doble discurso.
d).- Porque
ejercen el monopolio del poder, a despecho y excluyendo a sus afiliados y a la
sociedad civil
e).- Porque se han convertido en cazadores de
candidatos aventureros que les aseguren triunfos, sin importarles su estructura
partidaria y militancia, convicciones o proyectos
f ).- Porque ingresaron de pronto a la mercadotecnia
efectista y a la publicidad mediática, hasta el grado de sustituir a ésta por
los órganos y organismos estatales, derivados del perfeccionamiento de la Ley
Electoral en la materia.
g).- Porque lejos de buscar consensos reales y
legales en democracia, lo hacen en lo oscuro y al margen de la ley
La mayoría de los
partidos tradicionales vienen dando muestra de su gran debilidad: Sus objetivos
de corto plazo son pasar la valla electoral y/o colocar algunos parlamentarios,
o representantes locales, pero en el
largo plazo, tiende a desaparecer si es que no hay cambios profundos. Una
muestra de ella son las
alianzas electorales
2. Liderazgos caudillistas: Alan García, Toledo, Castañeda y
Keiko, y otros de paso mediático como PPK,
les preguntamos ¿tienen un partido para sostener una buena
gestión gubernamental? ¿Apuestan por construir institucionalidad política? que contestarían
O se miran en el espejo del Líder Nacionalista y sus conflictos internos,
Lo que podemos tomar
nota, es que tanto el Apra, Perú
Posible, Solidaridad Nacional y Fuerza 2011, tienen su fortaleza en sus
líderes; sin ellos casi no existen como partidos. Y tampoco hicieron el
esfuerzo de constituir un partido sólido cuando fueron gobierno y parece ser
que tampoco tienen esa perspectiva.
Perú Posible, fue
gobierno nacional y luego de ello, ha caído en el ostracismo político;
Solidaridad Nacional, rompió con Unidad Nacional, y en 8 años de gestión
municipal, no ha logrado consolidar al partido y; Fuerza 2011, es un aparato
netamente electoral, como en su momento fueron Cambio 90, Vamos vecino, Sí
Cumple, etc. y no tienen la lógica de fortalecer un partido “en serio”.
3. ¿Anti partidos?: Y el discurso anti-partido, se ha
actualizado: ya no es necesario criticar a los partidos y levantar o sobreponer
lo técnico sobre lo político,: sus listas
parlamentarias endebles y con mucha presencia de comerciantes aventureros, artistas, deportistas –que no tienen
trayectoria política-, candidatos presidenciales que tienen más discurso
personal que partidario, y las prácticas de casi todas las tiendas
políticas han denotado que los partidos sólo son nominales, y ello va en
desmedro de la democracia.
Esperemos Partidos Regenerados y Modernizados con visión de
futuro y que la ciudadanía en general y los actores políticos en particular,
hagamos el esfuerzo de romper con estas prácticas antidemocráticas y anti-partidos,
sumemos esfuerzos para construir instituciones políticas fuertes que den
soporte a re-crear y construir partidos políticos sólidos, acorde a nuestros tiempos
, ya que para el sistema
político y la ciudadanía los partidos
políticos deben ser "escuelas de gobierno" donde las personas con
aspiración a desempeñar cargos públicos, no sólo encuentren apoyo en sus
campañas, o en la presentación de su candidatura, sino también conocimientos y
entrenamiento que le aseguren un desempeño eficiente
y conforme a la legalidad democrática
en el cargo que finalmente obtengan. En gran medida, la calidad de nuestros gobernantes, en los distintos niveles del Estado, depende de
la calidad de los partidos políticos.
Los Partidos Modernos, deberán contar con cuadros serios;
militantes con juicio crítico, no fanatizado; con programas políticos enfocados
a la realidad; cuadros dirigentes hombres y mujeres que compartan una visión nueva
de desarrollo del país y una organización interna que no privilegie (o
fortalezca dependencias hacia personalismos caudillistas, políticos sofistas o
simples manipuladores advenedizos convocados por el hecho de tener algún poder
económico o social SI NUESTROS PARTIDOS NO SE MODERNIZAN INEVITABLEMENTE LA
REGENERACIÓN TARDE O TEMPRANO TENDRÁ QUE PROVENIR DE PARTIDOS NUEVOS.
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